El plástico es uno de los inventos más revolucionarios creados por la humanidad. Su empleo en ámbitos como la medicina o la alimentación han supuesto un avance mayúsculo en la seguridad alimentaria y sanitaria por sus cualidades higiénicas y versatilidad.
Concretamente en el transporte y mantenimiento de alimentos, el plástico ha jugado un papel esencial debido a que gracias a él los alimentos se pueden manipular y desplazar manteniendo un estado óptimo de consumo al tiempo que se garantizan unas altas cotas de seguridad e higiene. Si hoy podemos acceder en el lineal de nuestro supermercado a alimentos en perfecto estado de consumo y fechas de caducidad más largas es, entre otros avances, por el empleo del plástico.
A nivel ecológico, sin duda, los residuos plásticos son un problema importante, pero cabría reflexionar acerca de si el problema es del plástico en sí o del mal uso que se hace de éste.
En favor del plástico podemos decir que la fabricación de algunos productos plásticos puede implicar un gasto energético y de materias primas menor que la de otros productos que se perciben como menos contaminantes. En Serplasa, por ejemplo, llevamos años evolucionando y mejorando nuestra tecnología para lograr procesos productivos que consumen menos agua y emiten menos CO2, en una carrera imparable por lograr procesos ecológicos y socialmente más responsables.
Finalmente, sin duda, cabe hacer un mayor esfuerzo por la correcta utilización, reutilización y reciclaje de productos que emplean plástico. Por sus características hay tipos de plástico que, de no ser tratados correctamente, pueden acabar deteriorando el ecosistema, pero que podrían reutilizarse o reciclarse de una forma racional contribuyendo justamente en beneficio de este. En SERPLASA, fabricamos productos fácilmente reciclables porque están fabricados con un mismo polímero (PEBD, PEAD y PP).
En Serplasa también hemos apostado por la fabricación de productos de gran calidad y durabilidad, lo que permite un uso prolongado de los mismos, al tiempo que fabricamos cajas de plástico retornable, que pueden ser recicladas para contribuir a un proceso de fabricación y uso más sostenible.
En definitiva, el plástico es un material útil y revolucionario que debemos esforzarnos por utilizar del modo correcto con la visión y el convencimiento claros de que podemos seguir utilizándolo de forma conveniente y sostenible si tomamos las medidas apropiadas para ello.