Hoy más que nunca las organizaciones tienen que desarrollar sus actividades de una manera sostenible, y eso implica mantener un equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado y protección del medio ambiente y el desarrollo y bienestar social que las contextualizan.
Serplasa es totalmente consciente de ello y lleva a cabo todas sus operaciones teniendo muy presente estos tres pilares fundamentales y la materialización de sus objetivos.
Por ello dedica gran parte de sus recursos al mantenimiento e implantación de las correspondientes normas de Calidad, al funcionamiento bajo el mayor grado de eficiencia energética y apuesta por una Responsabilidad Social real y tangible.